viernes, 11 de enero de 2008

Tres navarros y un guipuzcoano se disputan las txapelas del Torneo Faustino

El remonte vivirá mañana por la tarde un día grande en el frontón Galarreta de Hernani, con la gran final del Torneo Faustino, el 37º Campeonato Oficial de Remonte Parejas: Altuna I-Etxeberria III contra Urriza-Lizaso (17.00 horas, con las cámaras de ETB 1 en directo). Será la final de las sorpresas, ya que no sólo la jugarán dos debutantes en el torneo, el doneztebarra José Javier Etxeberria, Etxeberria III, y el pamplonés Javier Urriza... sino que, además, por primera vez en muchas finales no habrá presencia de, al menos, uno de los dos considerados mejores delanteros del cuadro de remonte, Zeberio II y Ezkurra. Ellos se verán las caras en el segundo estelar de la tarde. Quien sí luchará por la txapela será el zaguero de Santesteban Iñaki Lizaso, que nunca había llegado a esta final (el Parejas es, precisamente, el único título que falta en su brillante palmarés). Y completará la nómina de finalistas el delantero de Amezketa Imanol Altuna, el Poulidor del remonte (acumula un título y seis subcampeonatos hasta la fecha). Los vencedores sucederán en el trono a Ezkurra-San Miguel, que se impusieron en la final jugada en enero de 2007 a Altuna I-Urrutia (40-24).

Los pronósticos antes de una final deben ser siempre muy reservados, aunque parece que la cátedra pelotazale se inclinará levemente por el color de los azules, Urriza-Lizaso (de entrada, se cantarán momios de 80 ó 90 a 100 a su favor). La trayectoria ascendente de esta pareja, que eliminó a Ezkurra-Olazar después de tres partidos de semifinales memorables, y su victoria en la liguilla de cuartos de final ante los propios Altuna I y Etxeberria III (se enfrentaron el 15 de diciembre, con un resultado de 40-35 a su favor) son los argumentos que están de su lado.

No obstante, también sus rivales llegan a la final con excelentes credenciales: los números dicen que Altuna I-Etxeberria III son la mejor pareja del torneo (cuatro victorias y una sola derrota, con la mejor diferencia de tantos, +30, por los +17 de Urriza-Lizaso). E, indiscutiblemente, han sufrido menos que sus rivales para alcanzar la final (terminaron como líderes de su liguilla de cuartos de final, tras dejar las cosas casi sentenciadas en la primera jornada con su apabullante 40-22 ante Zeberio II-Etxabe; y ventilaron su semifinal ante Juaristi-Eizagirre con un 2-0, sin necesidad de disputar el partido de desempate). Altuna I y Etxeberria III han perdido un solo partido del Torneo Faustino, contra Urriza-Lizaso, pero lo cierto es que ya tenían lograda la clasificación para semifinales (les bastaba hacer 12 tantos); está claro que el encuentro de mañana será otra historia.

Los cuatro remontistas tendrán mucho que decir, pero buena parte del desenlace dependerá de la actuación de Iñaki Lizaso, que es en teoría el mejor zaguero del cuadro y el pelotari más desequilibrante del cuarteto. Lizaso, que acumula en sus vitrinas las txapelas individuales del Torneo Casino Kursaal (2000) y del Torneo Martiko (2007), luchará con todas sus fuerzas para lograr un campeonato que siempre se le ha resistido. En el duelo de zagueros se verá las caras con su paisano y amigo Etxeberria III, un pelotari tardío, que a sus 34 años acaba de completar la mejor temporada de su vida, un gran año en el que ganó 17 partidos seguidos y en el que ha escalado hasta la primera línea del remonte. Pase lo que pase, es seguro que una de las txapelas volará de nuevo hacia Santesteban, una localidad que merecería un estudio sociológico por su desorbitada producción de remontistas de alto nivel (siete hay ahora en profesionales: los finalistas de mañana, Lizaso y Etxeberria III, además de Ezkurra, Olazar, Uterga, Iribarren y San Miguel).

En el duelo de delanteros, Altuna I tratará de hacer valer su experiencia y, sobre todo, su excelente momento de juego. El veterano delantero guipuzcoano (Amezketa, 39 años) ha completado un campeonato soberbio, en el que rayó la perfección en dos partidos (triunfos ante Zeberio II-Etxabe, 40-22; y ante Juaristi-Eizagirre, 29-40). No posee un golpe determinante, pero hace de su colocación en la cancha y de su depuradísima técnica armas muy eficaces. Las opciones de su pareja pasan, en buena parte, por su inspiración rematadora. Enfrente estará la gran incógnita de la final, el pamplonés Javier Urriza, un pelotari que ha roto con todos los cánones del remontista clásico. Urriza, que jamás se había puesto una cesta en la mano hasta hace un año y medio, completará con esta final una progresión inaudita. Debutó en el remonte hace tan sólo 11 meses, y tiene en su mano lograr un título reservado para unos pocos. Urriza tratará de explotar sus grandes virtudes: unas condiciones físicas privilegiadas (1,92 metros, una coordinación especial y un golpe demoledor) y una mentalidad de ganapartidos que se forjó en sus tiempos de palista, cuando logró los oros en paleta cuero (Pamplona 2002) y pala corta (México 2006).

El festival de mañana en Galarreta (16.00 horas, entradas a 30 euros) se completará con estos partidos: Ezkurra-Olazar contra Zeberio II-Iriarte (segundo estelar de la tarde); Sarasua-Urko contra Bereziartua-Gaztelu (primer partido); y Uterga-Badiola contra Agirresarobe-Ion (cuarto y último encuentro de la función).

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