En el remonte, la exigencia es total prácticamente día a día: con cuatro funciones fijas a la semana en el frontón Galarreta de Hernani, además de las que toquen en Navarra (en octubre volverá a abrirse el Euskal Jai Berri-Reyno de Navarra), las primeras figuras tienen continuas oportunidades para reivindicar su estatus. Mañana, en el día grande en Galarreta (festival desde las 16.00 horas), Iñaki Lizaso afrontará el último gran reto que le queda tras su fantástica reaparición en las canchas, después de su operación de menisco: Ezkurra-Auzmendi contra Altuna II-Lizaso. Es decir, el desafío de derrotar a Koteto Ezkurra, su gran enemigo en el frontón, y prácticamente, el único gran rival que le queda por vencer desde la semana pasada (grandes triunfos por 40-20 ante Altuna I-Iriarte, 40-23 ante Zeberio-San Miguel II y 40-34 ante Urriza-Urrutia en sus tres partidos desde su regreso, con Urriza, Altuna II y Uterga como compañeros, respectivamente). No se lo pondrá fácil un Koteto Ezkurra herido tras su reciente eliminación en las semifinales del Torneo Comunidad Foral de Navarra, y que ha mostrado un juego muy fresco desde su regreso de vacaciones.
El festival de mañana contará con un segundo estelar, en el que Urriza-Eizagirre se medirán a Altuna I-Etxabe. Es evidente que la intendencia de Galarreta apuesta cada vez más por programar al pamplonés Urriza en partidos de más exigencia. Eizagirre continúa siendo un gran aval en la zaga, pero enfrente estarán dos remontistas de una calidad indudable, dos clásicos situados desde hace años en el nivel más próximo al de las grandes figuras: el delantero Imanol Altuna y el zaguero Jokin Etxabe.
La función de mañana se completará con estos partidos: Zalakain-Olazar contra Etxeberria IV-Aizpurua II (primer encuentro de la tarde); y Bereziartua-Ángel Lekunberri contra Agirresarobe-San Miguel (cuarto y último).
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