Endika volvió a imponerse, por cuarta vez, a Barrenetxea IV en un partido individual en el que se impuso 30-28. El encuentro fue espectacular, un partidazo individual que hizo las delicias de los espectadores. Ambos pelotaris demostraron estar en plena forma y ser dos remontistas con enormes recursos para el mano a mano. Jugaron muchísimo y pelotearon una barbaridad para ser una lucha individual. Peloteo, buenas defensas, jugadas, saques, emoción... tuvo de todo el encuentro que se decidió por pequeños detalles.
El encuentro comenzó con un ligero dominio de Endika, que se adelantó 5-2, pero inmediatamente las tablas volvieron al marcador en el 5-5, seis iguales y empate a siete. El zaguero dio un segundo pequeño estirón y se puso con tres tantos de ventaja en el 10-7, 11-8 y 12-9 y pegó un arreón que parecía definitivo con un parcial de 10-1 que le puso en franquicia 22-11. El encuentro parecía sentenciado después de un inicio durísimo y que se rompió debido al acierto en el saque de Endika y que daba la sensación de que Barrenetxea acusaba el esfuerzo inicial.
Nunca más lejos de la realidad. El hernaniarra sacó su orgullo y sobre todo su brazo a pasear y le devolvió el parcial con un 0-12 y se adelantó en el marcador 22-23. El partido comenzaba de nuevo, pero con un Barrenetxea en racha y un Endika que veía impotente la reacción del rival.
Un fallo de Barrenetxea daba un respiro a Endika, que empataba a 23 y a partir de ahí las alternativas fueron constantes y cualquiera podía ganar. Endika volvía al mano 26-24, pero Barrenetxea le respondía con un 0-4 que le ponía a dos tantos de la victoria 26-28. En los últimos cuatro tantos Endika estuvo más acertado sobre todo no hizo ningún regalo y Barrenetxea en cambio entregó una pelota en el 28 iguales que supuso el 29-28. El último tanto lo realizó de saque Endika y decidió el encuentro 30-28. El ganador hizo 16 tantos en el peloteo por tres fallos y con el saque hizo 10 tantos por una falta. Barrenetxea hizo 15-2 en el peloteo y 9-2 con el saque.
