sábado, 16 de enero de 2010

Zeberio II se convierte en el rey del Parejas

• Los guipuzcoanos Zeberio II-Badiola vencieron esta tarde en el frontón Galarreta a los navarros Urriza-Lizaso en la gran final del II Torneo Tejados Aoiz – 39º Campeonato Oficial de Remonte Parejas (40-34, después de 81 minutos de partido y 636 pelotazos), en un encuentro durísimo y peleado con un sublime duelo entre Zeberio II y Urriza

• Patxi Zeberio logra su sexta txapela en su sexta final, y bate así el récord que atesoraba el ex remontista Kike Elizalde, con cinco títulos

• El zaguero de Azpeitia Imanol Badiola firma una sobresaliente actuación (8 saques) y logra su primera txapela del Parejas

Sábado, 16 de enero


Los guipuzcoanos Patxi Zeberio e Imanol Badiola sumaron esta tarde lo mejor de su juego (la entrega y el látigo del primero, la constancia y el saber estar del segundo) para llevarse con todo merecimiento las txapelas del II Torneo Tejados Aoiz – 39º Campeonato de Remonte Parejas (triunfo ante los navarros Urriza-Lizaso por 40-34, en el frontón Galarreta). Ocurrió en un encuentro durísimo, de 81 minutos y 636 pelotazosa buena y que elevó a los altares del remonte al delantero de Elduain Zeberio II: sumó su sexto título, con el que supera las cinco txapelas del ex remontista Kike Elizalde y se convierte en el remontista más laureado en el Parejas. Por su parte, el azpeitiarra Badiola logró su primera gran txapela, con la que culmina la progresión de sus 12 años como profesional del remonte.

La final respondió a todas las expectativas en cuando a tensión y dureza, en especial por la tremenda batalla que lidiaron Zeberio II y Javier Urriza. Los dos delanteros imprimieron al partido un ritmo altísimo y se enzarzaron en una refriega de pelotazos impresionante, diga de la ocasión. El guipuzcoano ofreció la imagen del delantero infatigable, hiperactivo en defensa y ataque, de una condición física privilegiada que aún a sus 35 años le hace pelear cada tanto como si fuera el último. Y hoy se encontró enfrente con un Urriza sublime, en su mejor versión de gigante inabordable y competitivo al límite, que fajó en defensa lo indecible para echar una mano (y dos) a Lizaso en defensa y echar el resto en ataque.

La pugna en la zaga descubrió la clave que explicó buena parte del desenlace de esta final: el partidazo que completó Badiola, impecable en el peloteo para sujetar los zambobazos de Urriza, trabajador en el juego de correcalles de Lizaso y sorprendentemente letal con su saque: se apuntó nada menos que 8 tantos directos, por sólo dos de un Lizaso que pundonoroso como siempre, pero falto de punch en fases devisivas para dar caza a sus rivales.

Tras una primera decena de tantos equilibrada (4-4, 9-9), el encuentro marchó siempre con viento favorable a los guipuzcoanos, bien cimentados en el acierto de Badiola en el saque. Su primera ventaja clara llegó en el 16-9, un primer aviso en el que anunciaron que con su pelota, fuerte y seca, complicaban mucho las cosas a Lizaso. Urriza recobró el saque con un buen pelotazo y los azules sacaron su pelota saltarina para revertir la situación (17-16).

La final entró entonces en una fase de alta tensión: hubo empates a 24 y a 25, pero en ambos casos el genio de Zeberio II evitó que los azules se adelantaran. El partido llegó en un puño a la última decena (29-27), con cada pareja fiel a su estilo: el pelotazo duro y seco Zeberio II, la ligereza y técnica de Lizaso. Y en el desenlace, pese al descomunal esfuerzo de Urriza por evitarlo, los guipuzcoanos se salieron con la suya: 32-27, 34-29, 38-32 y 39-34. El final fue apoteósico para Badiola: tras los 24 tantos y el recital de facultades de un Zeberio II inmenso, el zaguero rubricó la victoria con una última pincelada maestra, un saque perfecto que selló su gran día.



Declaraciones:

El hombre del récord, Zeberio II, estaba muy satisfecho: “Estoy contentísimo, no ya por la sexta txapela, sino por el partido en sí, muy duro y peloteado. Ganar una final tan dura es una gran satisfacción, es una alegría ofrecer un partido de buen nivel al público. El récord queda ahí, pero es algo a lo que no le doy demasiada importancia, lo que cuenta es rendir en el día a día durante todo el año”, dijo. “Sabíamos que teníamos enfrente un partido muy duro y hemos venido muy mentalizados a trabajar en la cancha: he pensado que si tenía que correr 40 kilómetros para ganar, lo haría. Los dos hemos trabajado muchísimo”, aseguró el delantero de Elduain, que tuvo una dedicatoria muy especial: “Toda la txapela va para Garikoitz Altuna y su familia (remontista que sufrió recientemente un pelotazo cerca del ojo izquierdo). La verdad es que nos acordamos muchísimo de él”, concluyó.

Su compañero, Imanol Badiola, estaba simplemente feliz. “Ganar esta txapela supone una alegría inmensa. Ha sido un partido durísimo, como pensábamos de antemano porque Urriza y Lizaso no regalan nada, son dos remontistas que llevan mucha pelota a buena. Pero nos hemos defendido y Zeberio II sobre todo ha estado extraordinario, ha defendido y ha atacado muy bien, tengo que agradecerle su trabajo porque es un delantero que te da mucha confianza, ha sido una gozada jugar con él el campoenato. Yo, por mi parte, he trabajado a tope y he evitado todo lo que he podido a Urriza y he tenido un buen día con el saque”, resumió Badiola, que tuvo doble dedicatoria: “La mitad va para Altuna II, y la otra mitad para mi familia, mi mujer y para mí mismo”. Badiola tenía previsto celebrar la txapela con una cena en Azpeitia, mientras que Zeberio II se reunió con los suyos en Andoain.

Como gran competidor, Iñaki Lizaso felicitó a los rivales, pero entonó el mea culpa tras la derrota: “Hay que darles la enhorabuena a los campeones. Ha sido un partido de fuerza física en el que yo he sido el más flojo, no me he sentido cómodo y no le he podido ayudar a mi compañero, que ha jugado como para ganar. El gran partido de Urriza ha hecho que mantuviera la ilusión, pero yo no he estado a la altura porque además he fallado en facetas técnicas del juego, como el saque o las dos paredes”, asumía un Lizaso. “Nuestros rivales han hecho un partido muy completo, y Badiola, sin hacer demasiado ruido ha ganado una txapela que se merecía en su carrera deportiva”, concluyó el doneztebarra.

Su compañero, Javier Urriza, lamentó no poder lograr su tercera txapela consecutiva. “No ha podido ser. La verdad es que hemos disputado un partido muy duro, pero hemos estado a remolque y así siempre es más difícil: a nosotros nos costaba mucho empatar en el marcador, pero ellos se defendían como jabatos, recuperaban el saque y lograban muy fácilmente ventajas de nuevo. Nos ha tocado sufrir y al final del partido he pegado un bajón físico, he acusado el esfuerzo”, reconoció Urriza, que elogió a sus dos rivales: “Patxi ha completado una gran exhibición tanto en lo físico como en técnica; y Badiola, sin hacer demasiado ruido, ha estado muy bien y ha sido clave en la victoria”, dijo el pamplonés.

Mañana, festival en el Euskal Jai Berri-Reyno de Navarra.
El remonte continuará con su actividad mañana en el frontón Euskal Jai Berri-Reyno de Navarra (16.30 horas), con un estelar entre Matxin III-Urrutia y los doneztebarras Uterga-Etxeberria III.

Marcador del encuentro entre Zeberio II-Badiola y Urriza-Lizaso (frontón Galarreta, gran final del II Torneo Tejados Aoiz – 39º Campeonato Oficial de Remonte Parejas): 4-0 / 4-4 / 7-4 / 7-6 / 8-6 / 8-7 / 9-7 / 9-9 / 16-9 / 16-15 / 17-15 / 17-16 / 19-16 / 19-17 / 21-17 / 21-20 / 24-20 / 24-24 / 25-24 / 25-25 / 28-25 / 28-26 / 29-26 / 29-27 / 32-27 / 32-28 / 33-28 / 33-29 / 34-29 / 34-32 / 38-32 / 38-34 y 40-34.

Uno a uno: Zeberio II: 24 tantos hechos y 6 errores; Badiola, 9 hechos (8 saques) y 2 fallos; Urriza, 18 hechos y 2 fallos; Lizaso, 8 hechos (2 saques) y 5 errores.

Duración: 81 minutos.

Dinero: salió 100 a 70 por Urriza-Lizaso con el 0-0.